viernes, 22 de abril de 2011

Cabecera del Río Chícamo (Abanilla)


La cabecera del Río Chícamo es uno de los pocos lugares húmedos que existen en la Región de Murcia. Es además uno de los lugares de mayor interés ecológico y paisajístico de la región, declarado zona LIC y por sus características geomorfológicas, sedimentológicas, tectónicas, hidrológicas e hidrogeológicas, lugar de interés geológico formando parte del patrimonio geológico de la Región de Murcia.

El río nace en las proximidades de Macisvenda, parte este del municipio de Abanilla. El nacimiento de este río está ligado a varios manantiales de poco caudal asociadas a los contactos de rocas permeables del cuaternario detrítico y las calizas y areniscas terciarias con los materiales impermeables subyacentes.

Desde el punto de vista geológico, la cabecera del Río Chícamo discurre por el límite noreste de la cuenca terciaria de Fortuna – Abanilla, aunque en la parte más septentrional corta también a sedimentos de las series prebética y subbética.

Hacia el sur, aparecen conglomerados tortonienses. Son sedimentos continentales de gravas y arenas que los torrentes transportaban en periodos de tormentas y que terminaban en el mar dando lugar a abanicos deltaicos. En periodos de calma atmosférica sobre estos conglomerados se depositaban arenas amarillas y grises donde vivían bivalvos.

Se formó una potente formación de conglomerados que ha sido erosionada poco a poco por el río, generando un angosto y largo desfiladero, con no más de dos metros de anchura en algunos tramos y alturas que pueden alcanzar los cuarenta metros.

A lo largo del desfiladero, se pueden observar fallas, pliegues abiertos, surgencias de agua, travertinos, ostreidos, cantos con ammonites, precipitación de carbonatos, etc.

Aguas abajo, las rocas detríticas disminuyen su tamaño de grano y cambian a areniscas rojizas, es la parte más distal del abanico deltaico, donde progresivamente aumentan los afloramientos de margas marinas amarillas y grises del fondo de la cuenca marina.

La Cuenca de Fortuna – Abanilla, al sur suroeste del nacimiento del Río Chícamo es un área cerrada por la propia configuración de los relieves béticos y rellena de materiales neógenos sedimentados en la transgresión miocena. Las alineaciones más septentrionales que configuran esta cuenca pertenecen al Subbético y son la Sierra de la Pila, Quibas, y Reclot, mientras que por el sur aparecen relieves béticos como la Sierra de Orihuela y la Sierra de Callosa. En la gran depresión central aflora el mioceno superior, donde se producen procesos erosivos que dan lugar a abarrancamientos profundos, debido a la erosión regresiva que ejerce la escorrentía superficial después de fuertes aguaceros tormentosos en estos materiales de escasa resistencia.

Los materiales blandos que aparecen en la cuenca de Fortuna- Abanilla (margas, arcillas y yesos) y que rellenan la depresión, son los responsables del modelado de badland, tan desarrollado en la comarca de Abanilla-Fortuna, y que sin duda constituye uno de sus signos de identidad.

Las tierras baldías o badlands, son un tipo de paisaje ruiniforme de características áridas y de litología rica en arcillas, extensamente erosionado por el viento y el agua. Cañones, cárcavas, barrancos, canales, hoodoos (chimeneas de hadas) y otras formas geológicas del estilo son comunes en las tierras baldías.

De un interés especial son los lugares donde las formas redondeadas de las cárcavas le confieren una belleza singular y muy diferente al de otros paisajes de badlands de la región donde sus formas son agudas (cuenca de Mula o rambla de Algeciras). Este tipo de modelado de erosión suele ser predominante en ambientes semiáridos, repletos de: regatos, surcos, cárcavas, barrancos y ramblas, que entallan y desmantelan vigorosamente los suelos y formaciones desprovistas de vegetación.

Los procesos de erosión en túnel, (piping) tienen gran importancia en el modelado de las cuencas sedimentarias semiáridas del sureste español. El proceso se origina por procesos subsuperficiales concentrados, que comienzan a partir de grietas de desecación o pequeñas diaclasas y provocan la remoción o disolución del material.

Guiados por Blas Rubio García, gran conocedor de la geografía murciana, hemos realizado un recorrido desde el suroeste, (cuenca de Fortuna – Abanilla) hasta el noroeste (nacimiento del Río Chícamo) donde hemos podido disfrutar entre otros de lugares como El Partidor, El Tollé, Paisaje Lunar, La Umbría, Cuevas, Lavadero público, Bebederos de ganado, Central hidroeléctrica, El Cajer, Molino del Chícamo o las Canteras de arcilla del keuper.

































4 comentarios:

  1. Qué bonitos lugares murcianos con una gran explicación técnica. Por cierto lo del "piping" qué es? Salu2.

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  2. Hola Santi.

    Piping (Erosión en túnel) es un tipo de erosión subsuperficial en materiales blandos. Se erosiona el material arcilloso por la entrada de agua a través de fracturas creando bajo el suelo conductos tubulares verticales y horizontales(huecos). Cuando la erosión subsuperficial del agua a través de estos conductos es importante, puede producirse el hundimiento de la zona. Podrás ver algún piping en los materiales arcillosos y margosos de Castillejar y Galera. A veces afectan a tramos de carretera y se observa el desplome del aglomerado asfáltico creándose una oquedad bajo la carretera. También son comunes en terrazas de cultivo abandonadas.

    Tengo pendiente una salida por la comarca con Francis, quizás este verano. A ver si coincidimos.

    Saludos.

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  3. Vaya hombre, y yo que pensaba que serían huellas de algún animal prehistórico, jejejeje. Gracias por la info y estaré muy gustoso de acompañaros en esa salida que dices estás planeando con Francis.
    Salu2.

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  4. Bueno, en Jumilla existen pisadas fósiles de Hipparion (équido del mioceno superior)aunque en aquella fecha que sepamos, no los cabalgaba nadie. jejeje.
    Igual pongo información sobre esto en el blog.

    Saludos poblenses.

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