Recuerdo que, siendo pequeño, visité un día con mi padre la tienda de Guillermo Marín en la calle Ramón y Cajal. Mientras ambos conversaban junto al mostrador, yo me entretenía observando las estanterías y las muestras de telas que se exhibían en la tienda. En un momento dado, Guillermo se acercó a mi y mirando por la parte superior de sus lentes, con su tono de voz peculiar me dijo… ¿Sabes que muchacho? Nuestro pueblo, La Puebla de D. Fadrique, es un pueblo que tiene nombre y apellidos. Aquel comentario inesperado y a la vez curioso llegó hasta mi hipocampo, formando desde ese momento parte de mis recuerdos. Años después me propusieron desde el Ayuntamiento realizar un tríptico descriptivo sobre la historia y entorno natural de la Puebla de D. Fadrique, con el consentimiento de Jesús Rubio para utilizar los datos de su publicación Arte e Historia en Puebla de D. Fadrique, realicé el texto del tríptico en el que plasmé aquellas palabras de Guillermo:
“Alguien dijo alguna vez de este pueblo que tiene nombre y apellidos, no tenemos más que pronunciarlo, Puebla de D. Fadrique, para darnos cuenta de que tiene personalidad propia, carácter y señorío. Bautizada por D. Fadrique de Toledo Duque de Alba, el 9 de Noviembre de 1525, arropada por las Sierras del Calar, Berruezo, Guillimona, Cerros de la Cruz y Campillejos, acunada al pie de la imponente Sierra de Sagra y vigilada a través de la Piedra de la Rendija, abre sus ojos al sol naciente”
La Puebla, vigilada a través de la Piedra de la Rendija y acunada al pie de la Sierra de la Sagra.
La Piedra de la Rendija es sin duda uno de los lugares más importantes de Puebla de D. Fadrique, en El Calar, los antiguos vieron una piedra que estaba en lo alto “Piedra Alta” y a mayor cota sobre esta, hallaron un curioso peñasco que contenía una rendija “La Piedra de la Rendija” roca que con el tiempo se ha convertido en un símbolo y un lugar de referencia para este pueblo. Hendidura, raja o abertura larga y estrecha que se produce en cualquier cuerpo sólido y lo atraviesa de parte a parte, es la definición de rendija según el diccionario de la Real Academia Española de la Lengua.
No sabemos en qué momento de la historia los habitantes de La Puebla de D. Fadrique comenzaron a llamar “Piedra de la Rendija” a este sitio, lo más probable es que el apelativo se deba a la perspicacia de algún pastor, leñador o cazador de los que antaño ascendían desde el pueblo al peñasco.
Si sabemos que desde antiguo, la Piedra de la Rendija ha sido un referente para los habitantes de Puebla de D. Fadrique y que ha sido nombrada año tras año en los pregones navideños como el del año 1971, que dice textualmente:
Antes de darle comienzo al pregón que ahora comienza,
quiero decir, si calláis unas cuantas palabrejas.
Os diré que los antiguos amaron mucho
a esta piedra que hay encima del Calar,
por lo mucho que recuerda a otra cosa parecida,
pero mucho más pequeña;
como la amaron, la amamos y la amarán
los que vengan per sécula seculorum et per seculorum sécula.
Pero si alguien conoce bien esta rendija, este es Urbano Castillo, quien de madrugada y día tras día, partía caminando desde la Puebla hasta la Rendija pasando por la Asperilla y por la Piedra Alta. Subía y bajaba andando en un recorrido de más de una hora, con el fin de realizar su labor de vigilante de incendios. Hoy día la vereda de acceso por donde pasaba Urbano está impracticable por falta de uso.
En la Piedra de la Rendija se encuentra el puesto de vigilancia del Calar de la Puebla, inicialmente comenzó siendo una caseta de pequeñas dimensiones, que pasó a ser posteriormente una garita circular acristalada de 3 metros de diámetro aproximadamente. Este lugar se ha convertido en uno de los puntos de vigilancia más importantes en la lucha contra incendios forestales de la provincia de Granada. Desde este lugar por su facilidad de comunicación y situación geográfica, se coordina la información obtenida en la vigilancia contra incendios forestales de los montes de la comarca de Huéscar.
Aquí se puede disfrutar del paisaje del municipio con unas preciosas panorámicas, además, por sus características geológicas, pienso que es uno de los lugares de interés geológico de Puebla de D. Fadrique.
La Piedra de la Rendija se encuentra en el término municipal de Puebla de D. Fadrique. Desde La Puebla se puede acceder al lugar a través del camino del Tornajico hacia la Piedra Alta o a través del camino de la Tejera por Juan de Robles y la Loma.
Sus coordenadas geográficas son:
Latitud: 37º 56´ 56. 68´´ N
Longitud: 2º 28´22.69´´ W
La altitud sobre el nivel del mar es de: 1809 metros .
Desde el punto de vista geológico encontramos en el lugar una gran hendidura en materiales calizos del lias (Jurásico inferior) generada por la presencia de familias de discontinuidades de dirección predominante NE-SW acompañadas de fracturas de mayor entidad de dirección NW-SE. Su ensanchamiento se produce entre otras causas, por la disolución superficial de la caliza (karstificación) afectada por agua de escorrentía o almacenada superficialmente en puntos donde la microtopografía permite una mejor retención o canalización del agua o la humedad. La disolución superficial de las calizas se acelera durante las lluvias debido a la acidez por el anhídrido carbónico del aire, que por hidratación se convierte en ácido carbónico.
Pero antes de comenzar
a destapar la valija,
mirar conmigo al calar
donde sigue sin tapar
La Piedra de la Rendija.
A la memoria de mi buen amigo Francisco Brígido Martínez, por lo buenos momentos que compartimos como vigilantes en la Piedra de la Rendija.
Fuentes consultadas:
Pregones navideños de Puebla de D. Fadrique.